Las motos son algo más que una afición en la vida de José. Entre otras cosa, porque se pasa el día encima de una a la caza de una meta muy concreta: conseguir que nuestros pisos estén en perfecto estado, asignarles un valor coherente y encontrar a quién de verdad necesite este producto. Un gran “conseguidor” de lo que hoy llamamos negociaciones win-to-win, donde todos ganan: José el orgullo del trabajo bien hecho y nuestros clientes el piso que soñaban.